La policía colombiana comunicó este miércoles que confiscó 49 toneladas de coltán y estaño que habían sido extraídas por disidentes rebeldes de las FARC en una zona selvática en la frontera con Venezuela, justo cuando estaban por ser enviadas a China.
La necesidad mundial de coltán ha aumentado significativamente, ya que de este se extrae tantalio, un metal empleado en la producción de teléfonos, computadoras e incluso armamento. Su extracción provoca serios conflictos sociales y ambientales en diversas partes del mundo.
El envío detenido en la ciudad de Villavicencio es fruto de la minería clandestina en Guainía y Vichada (este), dos departamentos forestales casi desiertos de gran biodiversidad que colindan con Venezuela.
La vigilancia del tráfico ilegal de coltán en Colombia cuenta con el respaldo de la oficina estadounidense de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), que ahora intenta determinar qué otros países adquieren estos envíos ilegales, según el ministerio de Defensa.
Los grupos delictivos en Colombia obtienen recursos de la minería ilegal de coltán, estaño y oro, una actividad que destruye bosques, contamina ríos y amenaza a las comunidades indígenas que dependen de la selva para sobrevivir.
Con Información de NOTICIA AL MINUTO.
lo que les puedo decir es que de parte de Venezuela debemos instalar a la FARB y al primero que se pase a territorio venezolano dispararle ya no se van a llevar nuestros recursos de gratis vamos padrino Lopez acción en ese lado de la frontera