La querella de Blake Lively contra su compañero de elenco y director de ‘It Ends With Us’ (‘Romper el círculo’), Justin Baldoni, ha revelado las estrategias de una industria que, mediante el dinero, daña la reputación de uno para proteger la imagen pública del otro.
La demanda de 80 páginas que Lively interpuso en California describe no solo el acoso sexual y los comentarios inadecuados sobre su apariencia que supuestamente hizo Baldoni durante la filmación del proyecto, sino que revela un plan para desacreditar su imagen pública.
Este esquema, diseñado por el caro equipo legal de Baldoni, contemplaba, de acuerdo a la demanda, una estrategia coordinada en redes sociales para crear una historia negativa en su detrimento tras su denuncia del «acoso sexual constante y otros comportamientos inquietantes» experimentados durante las grabaciones.
Los documentos presentados por la actriz, y que fueron revisados por The New York Times, contienen un intercambio de mensajes privados entre un publicista que colabora con el director del proyecto y la especialista en gestión de crisis, Melissa Nathan.
«Él (Baldoni) desea percibir que ella (Lively) podría ser sepultada», afirma el publicista. «Sabes que podemos eliminar a cualquiera», dice Nathan, en un supuesto intercambio de mensajes que tuvo lugar el pasado agosto, junto con la promoción de ‘It Ends With Us’.
Con Informacion de AGENCIA EFE
